Invertir en una franquicia de gasolinera puede ser una forma excelente de generar ingresos constantes en 2025. Ahora bien, aunque puede parecer una apuesta segura, hay que tener en cuenta que los márgenes de beneficio por la venta de combustible son muy bajos, en torno al 1%, así que lograr una operación realmente rentable no es tan sencillo como parece.
La buena noticia es que, con una planificación inteligente y una estrategia bien definida, el éxito está al alcance. En esta guía, te explicaremos paso a paso cómo comprar una franquicia de gasolinera y te daremos algunos consejos clave para aumentar tus posibilidades de éxito desde el primer momento.
Palabras Clave
Invertir en una franquicia de gasolinera requiere una inversión inicial elevada, habitualmente desde unos 300.000 €, que varía según la marca, la ubicación, el tamaño de la estación y los servicios adicionales que ofrezca.
Además del canon de entrada, los franquiciados deben asumir regalías vinculadas a las ventas de combustible y aportes de publicidad, lo que afecta directamente a la rentabilidad en un sector con márgenes ajustados.
Elaborar un plan de negocio sólido es esencial: debe incluir análisis de mercado, demanda local, competencia, estrategia de ubicación, proyecciones financieras y cumplimiento normativo ambiental y de seguridad.
Debido al alto coste de entrada, la financiación suele requerir una combinación de capital propio, préstamos bancarios, ayudas públicas o financiación ofrecida por la propia marca.
Cómo Comprar una Franquicia de Gasolinera: Guía Paso a Paso
¿Estás pensando en invertir en una franquicia de gasolinera? Aquí te contamos cómo hacerlo, paso a paso.
Paso 1: Entiende Cómo Funcionan las Franquicias de Gasolineras
Muchas gasolineras funcionan bajo el modelo de franquicia. En este tipo de acuerdo, un emprendedor independiente (el franquiciado) paga a una empresa matriz (el franquiciador) por el derecho a vender su combustible y utilizar su marca comercial.
Esto significa que, si decides convertirte en franquiciado de Shell, por ejemplo, podrás utilizar su imagen de marca, su logotipo y su señalética. A cambio, además de los costes iniciales y la cuota de franquicia, tendrás que pagar un porcentaje de tus ventas de combustible en concepto de regalías, así como contribuir al fondo de publicidad.
Montar una gasolinera franquiciada no solo te permite operar bajo una marca reconocida con una base de clientes fiel, sino que también garantiza un suministro fiable de carburante de calidad.
Como es lógico, el combustible será tu producto principal. Y eso tiene una ventaja clara: si eliges bien la ubicación, podrás asegurarte un flujo constante de tráfico. Sin embargo, los márgenes de beneficio en el combustible son muy ajustados. Por eso, es fundamental pensar desde el inicio en otras vías para generar ingresos adicionales.
Paso 2: Investiga las Distintas Franquicias de Gasolineras
No nos cansamos de decirlo: antes de tomar cualquier decisión, investiga bien. Es un paso clave.
Cuando analices opciones de franquicia, revisa los antecedentes y la reputación del franquiciador, así como la demanda de sus servicios en la zona donde quieras operar. Dado que el margen del combustible es tan bajo, tendrás que valorar cómo podrías generar ingresos complementarios.
¿Cuenta la gasolinera con una tienda de conveniencia? Si no la tiene, ¿qué trámites tendrías que seguir para abrir una? Muchos franquiciados optan por combinar la gasolinera con otra franquicia complementaria, para diversificar los ingresos y atraer más clientes.
Paso 3: Revisa Detenidamente el DIPF
Antes de firmar nada con el franquiciador, es fundamental que dediques un tiempo a conocer a fondo con quién vas a asociarte. Para ello, tendrás que revisar con lupa el Documento de Información Precontractual de la Franquicia (DIPF).
Este documento, obligatorio por ley en España, debe ser entregado al menos 20 días hábiles antes de la firma del contrato o del pago de cualquier cantidad. Contiene toda la información clave que necesitas analizar antes de tomar una decisión de inversión.
El DIPF incluye información relevante sobre:
La identidad y trayectoria del franquiciador.
El modelo de negocio y funcionamiento de la red.
Las condiciones económicas de la franquicia (canon de entrada, regalías, inversión inicial estimada, entre otras).
Las obligaciones de ambas partes.
La duración del contrato, su renovación, resolución y condiciones de cesión.
También deberías fijarte si el documento especifica claramente las condiciones sobre la exclusividad territorial. Si no se menciona, es importante que consultes directamente con el franquiciador antes de firmar. Este aspecto puede marcar una gran diferencia a mediano y largo plazo.
Paso 4: Crea un Plan de Negocio Sólido
Aunque una franquicia te proporciona procedimientos ya definidos y el respaldo de una marca consolidada, eso no significa que puedas prescindir de un buen plan de negocio. Todo lo contrario: necesitas uno bien adaptado a tu zona, tu perfil de cliente y tus objetivos.
Piensa en tu plan de negocio como el mapa que te guiará durante todo el camino. En él deberías incluir tanto información general basada en el DIPF como detalles específicos de tu situación local.
Tu plan de negocio debería contemplar:
Un resumen ejecutivo: visión del proyecto, objetivos financieros y necesidades de financiación.
Un análisis de mercado local: perfil de clientes, competencia directa, oportunidades y riesgos.
Estrategia de marketing y ventas en tu zona.
Necesidades de personal y gestión del equipo.
Y en el caso concreto de una franquicia de gasolinera, hay un punto que no puedes pasar por alto: los requisitos legales y de cumplimiento normativo. Vender combustible implica cumplir con una serie de regulaciones estrictas en materia de medio ambiente, seguridad e higiene. Deberás detallar en tu plan:
Las licencias y permisos que necesitas.
Las normativas autonómicas y locales que se aplican.
Cómo vas a asegurar el cumplimiento desde el primer día.
Preparar bien este plan no solo te ayudará a poner en marcha la franquicia con confianza, sino que también será clave si necesitas financiación externa o presentarte ante socios o entidades públicas.
Paso 5: Encuentra la Ubicación Ideal para tu Gasolinera
La localización de tu gasolinera es uno de los factores más importantes para su éxito. Aunque al invertir en una franquicia de este tipo puedes asumir que habrá una demanda constante de combustible, lo cierto es que una ubicación mal elegida puede limitar seriamente tu capacidad de atraer clientes.
Por eso, lo ideal es que el punto de venta esté cerca de una carretera transitada, sea fácilmente accesible y cuente con buena visibilidad. Una gasolinera escondida o mal comunicada tendrá dificultades para competir, por muy buena que sea la marca.
También debes confirmar si el franquiciador te ofrece derechos exclusivos sobre un territorio concreto. Si no lo hace, nada impide que otros franquiciados de la misma marca abran una estación en tu misma zona, lo que podría saturar el mercado.
Seguro que alguna vez has pasado por un cruce donde hay una gasolinera en cada esquina. Incluso si tienes exclusividad territorial con tu franquiciador, es crucial que analices si tu estación puede competir realmente con las ya existentes en los alrededores.
Además de estudiar a la competencia, conviene investigar planes urbanísticos, desarrollos futuros o posibles obras en la zona. Un nuevo polígono, zona residencial o área comercial puede suponer un aumento de clientes potenciales. Por el contrario, una obra que desvíe el tráfico habitual podría afectar negativamente a tu facturación.
Paso 6: Asegura la Financiación Necesaria
Abrir una franquicia de gasolinera supone una inversión inicial considerable, que puede ir aproximadamente desde los 300,000€. Aunque normalmente se requiere que dispongas de parte del capital en fondos propios, lo más común es que necesites financiación externa para poner en marcha el proyecto.
Algunas de las opciones más habituales son:
Préstamos bancarios tradicionales: Muchas entidades financieras ofrecen productos específicos para nuevos negocios, incluidos los relacionados con franquicias. Para acceder a condiciones favorables (tipo de interés, plazos, entre otros), necesitarás tener un buen historial crediticio y un plan de negocio sólido y bien documentado.
Financiación pública o subvenciones: Podrías explorar ayudas disponibles a través de organismos como ENISA, ICO, o programas de apoyo al emprendimiento de tu comunidad autónoma. Suelen ofrecer condiciones atractivas para negocios que generan empleo o fomentan la actividad económica local.
Financiación del propio franquiciador: Algunas marcas ofrecen financiación interna para facilitar la entrada a nuevos franquiciados. Puede ser una opción muy interesante si ofrece mejores condiciones que la banca tradicional, pero no olvides leer bien la letra pequeña y evaluar si se adapta a tus necesidades reales.
Tener una estructura financiera sólida desde el principio es clave para arrancar con seguridad y centrarte en lo más importante: hacer crecer tu negocio.
Paso 7: Firma el contrato de franquicia
Una vez que hayas encontrado la ubicación ideal, definido cómo vas a rentabilizar tu gasolinera y estés conforme con toda la información recogida en el DIPF, ya estarás prácticamente listo/a para dar el paso final: firmar el contrato de franquicia.
Este contrato es un acuerdo legal vinculante entre tú y el franquiciador. En él se detallan todos los aspectos clave de la relación, como:
Cuotas iniciales y pagos periódicos (regalías, canon de publicidad, entre otros).
Uso de la marca y derechos de imagen.
Duración del contrato y condiciones de renovación.
Limitaciones de competencia.
Resolución de conflictos.
Requisitos de reporte financiero y derecho de auditoría por parte del franquiciador.
Es muy común que este tipo de contratos incluya un lenguaje jurídico bastante denso. Por eso, te recomendamos asesorarte con un abogado especializado en franquicias o con experiencia en el ámbito empresarial. Esta revisión te ayudará a identificar posibles cláusulas abusivas o puntos poco claros antes de comprometerte. Recuerda que, una vez firmado, hay poco margen para renegociar.
Paso 8: Obtén Todas las Licencias y Permisos Necesarios
Las gasolineras están sujetas a un marco normativo muy estricto debido a los riesgos que implican, como vertidos, emisiones tóxicas o posibles incendios. Por eso, antes de abrir tu franquicia, deberás tramitar una serie de licencias y permisos obligatorios.
En España, aunque la normativa puede variar ligeramente entre comunidades autónomas, lo habitual es que necesites:
Licencia de apertura y actividad otorgada por el ayuntamiento correspondiente.
Licencia ambiental (para controlar emisiones, residuos, impacto en el entorno).
Autorizaciones específicas para el almacenamiento y venta de carburantes.
Permiso de instalación de tanques subterráneos y sistemas de seguridad.
Certificados de seguridad industrial y prevención de incendios.
Cumplimiento de normativa de salud y seguridad laboral.
Autorización urbanística y compatibilidad con el uso del suelo.
Inscripción en registros autonómicos y estatales si aplica.
Como ves, el proceso puede ser complejo y técnico, por lo que contar con asesoramiento profesional es muy recomendable. Un abogado especializado o un gestor con experiencia en negocios de este tipo puede ayudarte a agilizar trámites y garantizar que todo esté en regla antes de la apertura.
Paso 9: Contrata y Forma a tu Equipo
El último paso antes de abrir las puertas de tu gasolinera franquiciada es formar el equipo que te ayudará en el día a día. La buena noticia es que este tipo de negocio no requiere perfiles altamente cualificados, lo que te dará acceso a un amplio abanico de candidatos. Ahora bien, eso no significa que puedas descuidar el proceso de selección: la fiabilidad y el compromiso son clave.
La mayoría de las gasolineras suelen funcionar con uno o dos empleados por turno. Por eso, una sola baja inesperada o retraso puede afectar directamente a la operativa diaria. Tómate tu tiempo para contratar personas responsables y con buena actitud.
A la hora de organizar tu plantilla, ten en cuenta:
¿Cuántos empleados necesitas realmente?
¿Cómo vas a organizar los turnos (mañana, tarde, noche)?
¿Qué salario puedes ofrecer?
Es importante que el sueldo sea competitivo para mantener una buena motivación y estabilidad en el equipo. Dicho esto, ten presente que los márgenes en este tipo de negocio no son muy amplios, así que tendrás que encontrar un equilibrio entre lo que puedes pagar y lo que necesitas para atraer talento fiable.
Paso 10: Prepara la Apertura
¡Ya casi estás! Una vez que tienes el equipo listo y todo en regla, llega el momento de abrir las puertas y empezar a recibir clientes. Y si quieres arrancar con fuerza, te recomendamos planificar una buena campaña de apertura que te ayude a atraer tráfico desde el primer día.
Aquí van algunas ideas para promocionar la apertura de tu gasolinera:
Ofrece descuentos especiales a vecinos de la zona.
Lanza un programa de fidelización desde el inicio.
Regala snacks, cafés o incluso lavados de coche durante la semana de inauguración.
Alquila vallas publicitarias en los alrededores para mejorar tu visibilidad.
En muchos casos, el franquiciador te ayudará con parte del marketing inicial, pero lo más habitual es que seas tú quien tenga que crear una estrategia local adaptada a tu público. Cuanto mejor comuniques tu apertura, más posibilidades tendrás de generar un impacto desde el inicio.
Ventajas de Invertir en una Franquicia de Gasolinera
Comprar una franquicia de gasolinera puede ser una decisión empresarial segura, rentable y con proyección de futuro. Estas son algunas de las ventajas más destacadas:
Una Marca Consolidada
Al operar bajo una franquicia, puedes aprovechar todo el valor de una marca reconocida, con un modelo de negocio probado y una base de clientes fieles. Si decidieras abrir una gasolinera independiente, tendrías que construir la marca desde cero, asumir más riesgos y enfrentarte en solitario a un mercado muy competitivo.
En cambio, con una franquicia ya posicionada, te beneficias de campañas de marketing nacionales, soporte operativo y muchas otras herramientas que te facilitan el arranque y la gestión diaria del negocio.
Demanda Constante de Combustible
Aunque los vehículos eléctricos van ganando terreno poco a poco, la demanda de carburante sigue en aumento. Se prevé que la industria del automóvil continúe expandiéndose hasta, al menos, 2032. Más coches en circulación significa más clientes potenciales para tu gasolinera.
Si eliges una buena ubicación, puedes contar con un flujo constante de clientes a lo largo del tiempo. También, puedes ir un paso más allá e incorporar puntos de carga para vehículos eléctricos, adaptándote así al cambio de hábitos de consumo y preparando tu negocio para el futuro.
Un Solo Negocio, Múltiples Fuentes de Ingreso
Una gasolinera no tiene por qué limitarse solo a vender combustible. De hecho, la mayor parte de los beneficios suelen venir de servicios complementarios: tiendas de conveniencia, restauración rápida, lavado de coches, taller mecánico.
Una buena gasolinera puede convertirse en un espacio multifuncional, con varios negocios funcionando de forma paralela y generando ingresos distintos pero complementarios. Este enfoque no solo diversifica el riesgo, sino que aumenta notablemente el potencial de rentabilidad.
Alto Volumen de Clientes
Si decides complementar tu gasolinera con una tienda 24 h o un servicio que cubra necesidades básicas fuera del horario comercial habitual, puedes captar un gran volumen de tráfico peatonal, sobre todo en ubicaciones con mucho movimiento.
Y si eliges abrir cerca de una autopista o en un cruce muy transitado, tendrás aún más posibilidades de atraer clientes de forma constante. Las gasolineras cumplen una función esencial en la vida diaria, y eso, bien gestionado, es una ventaja competitiva muy poderosa.
Inconvenientes de Invertir en una Franquicia de Gasolinera
Como en cualquier inversión, no todo son ventajas. Antes de comprometerte legalmente —y realizar una inversión que, en algunos casos, puede llegar a cifras millonarias—, es fundamental tener una visión realista del negocio. Estas son algunas de las principales dificultades que puedes encontrar:
Requisitos Normativos Complejos
Montar una gasolinera implica enfrentarse a una carga regulatoria considerablemente mayor que en otros tipos de franquicias. Debido a los riesgos asociados (fugas, residuos contaminantes, riesgo de incendio, entre otros), deberás cumplir con normativas estrictas en materia medioambiental, de salud y de seguridad, tanto a nivel local como autonómico y estatal.
Esto se traduce en una importante cantidad de trámites, licencias, revisiones periódicas y adaptaciones constantes a posibles cambios legislativos. Y sí, todo esto conlleva tiempo, recursos y cierta burocracia que no puedes pasar por alto.
Alta Inversión Inicial
Una franquicia de gasolinera puede requerir una inversión inicial muy elevada, en algunos casos llegando incluso a millones de euros. Para que esa inversión tenga sentido, tendrás que estudiar el mercado a fondo, elegir la ubicación con mucho criterio y llevar un control constante del rendimiento del negocio.
No es un proyecto para lanzarse a la ligera. Pero si haces bien los deberes, el retorno puede ser muy sólido a mediano y largo plazo.
Volatilidad del Precio del Combustible
Como franquiciado, tendrás poco o ningún control sobre el precio al que vendes el carburante, ya que este suele venir fijado por la marca o condicionado por el mercado. Eso significa que tu margen de beneficio estará muy influido por la volatilidad del precio del petróleo y las condiciones económicas globales.
Aunque el flujo de clientes sea constante, tus ingresos pueden fluctuar más de lo que te gustaría. Y, como mencionamos antes, los márgenes en la venta de combustible son ya de por sí bastante ajustados.
Un Sector con Mucha Competencia
El negocio de las gasolineras es muy competitivo. Cada vez más inversores se interesan por este tipo de franquicias debido a la estabilidad de la demanda y la fuerza de las marcas. Pero eso significa que puedes encontrarte con varios competidores a pocos metros de tu estación.
En algunos casos, incluso podrías estar compitiendo con otras estaciones de la misma franquicia si no tienes garantizada una exclusividad territorial. Por eso es tan importante revisar a fondo este punto antes de firmar ningún contrato.
Aspectos Clave a Tener en Cuenta Antes de Comprar una Franquicia de Gasolinera
Abrir una gasolinera franquiciada no es precisamente un camino fácil, pero si se hace bien, puede ser una inversión muy rentable: el margen neto puede alcanzar hasta el 30%. Eso sí, para llegar ahí, necesitas tener en cuenta algunos aspectos adicionales antes de tomar una decisión final.
Estrategia de Publicidad Local
Al asociarte con una marca, disfrutarás del impacto de sus campañas nacionales de marketing, lo cual es una gran ventaja. Ahora bien, eso no sustituye el trabajo de posicionarte a nivel local.
Para atraer al público de tu zona, es importante que:
Te involucres en la comunidad local (patrocinios, eventos, asociaciones vecinales).
Utilices publicidad geolocalizada (radio, prensa local, redes sociales segmentadas por área).
Construyas una presencia cercana y reconocible para quienes pasan por delante a diario.
Recordemos que la fidelidad de los clientes muchas veces nace del trato directo y del conocimiento del entorno, no solo de la marca.
Verifica Quién es el Responsable de los Tanques y Surtidores
La instalación, mantenimiento y posible sustitución de tanques y surtidores puede representar un coste importante, por lo que debes saber con claridad quién asume esa responsabilidad.
¿Es el franquiciado o el franquiciador? ¿La marca? ¿El propietario del terreno si estás en régimen de alquiler? Antes de firmar cualquier contrato, asegúrate de tener este punto perfectamente definido, ya que un malentendido aquí puede traducirse en gastos inesperados a mediano plazo.
Comprende las Implicaciones Medioambientales
El cumplimiento normativo en materia medioambiental es una de las grandes responsabilidades en este tipo de negocio. Las sanciones por incumplimiento o accidentes pueden ser muy costosas, no solo a nivel económico, sino también en términos de reputación.
Antes de cerrar el trato, asegúrate de:
Revisar en detalle el contrato de franquicia para ver quién asume la responsabilidad en caso de contaminación del suelo, fugas de combustible u otros incidentes.
Realizar una evaluación medioambiental del terreno, especialmente si vas a alquilar, para detectar posibles problemas previos que no te corresponda asumir.
Un análisis preventivo te puede ahorrar muchos dolores de cabeza en el futuro.
¿Listo/a para dar el Paso?
El negocio de las gasolineras sigue siendo una apuesta sólida. Pero como ya has visto a lo largo de esta guía, no todo es tan sencillo: los márgenes son ajustados, la normativa es exigente y el éxito depende en gran medida de la planificación y la ejecución.
Por eso, si estás pensando en invertir en una franquicia de gasolinera, no tomes decisiones a ciegas. Investiga a fondo cada opción, analiza los números, estudia el mercado local y evalúa bien a los franquiciadores.
En ese proceso, estamos para ayudarte. Nuestra plataforma te permite explorar cientos de oportunidades de franquicia verificadas, comparar datos clave y descubrir opciones que se ajusten a tu perfil y objetivos. Todo en un mismo lugar, sin rodeos y con el respaldo de expertos que saben lo que significa emprender con cabeza.
Así que si estás listo para empezar, hazlo con Rolty. Que tu decisión de hoy sea el primer paso hacia un negocio sólido y con futuro.
Emprendedores & Franquicias



