¿Ya tienes una franquicia que funciona y te preguntas cómo seguir creciendo como emprendedor? Muchos franquiciados optan por abrir más unidades de la misma marca, pero quizá tú te estés planteando otra cuestión: ¿puedes tener varias franquicias de marcas distintas?

Aunque supone más complejidad, abrir una franquicia de otra marca es posible. En este artículo te explicamos todo lo que necesitas saber sobre la gestión de franquicias multimarcas.

Puntos Clave

• En la mayoría de los casos puedes ser franquiciado de varias marcas, siempre que tu contrato y el DIPF no incluyan cláusulas de exclusividad, no competencia o restricciones por conflicto de intereses que lo impidan.
  
  

• Gestionar distintas marcas permite diversificar ingresos y reducir riesgos sectoriales, ofreciendo mayor estabilidad financiera si una de las franquicias atraviesa un periodo débil.
  
  

• El modelo multimarca implica más carga operativa: cuantos más negocios gestiones, más procesos, equipos, calendarios y obligaciones contractuales tendrás que coordinar.
  
  

• Antes de invertir en otra marca, revisa cuidadosamente el contrato y el DIPF, especialmente las cláusulas de territorio, exclusividad, conflicto de marcas y no competencia, para evitar sanciones o conflictos legales.
  
  

¿Puedes Tener Franquicias de Distintas Marcas?

La respuesta corta es sí. En la mayoría de los casos, puedes ser franquiciado de varias marcas siempre que el Documento de Información Precontractual (DIPF) y tu contrato de franquicia lo permitan. Ahora bien, que sea posible no significa que siempre sea una buena idea.

Lo habitual es que un franquiciado crezca abriendo más unidades de la misma marca. Sin embargo, cada vez más optan por el modelo conocido como “multimarca” para diversificar riesgos y aprovechar nuevas oportunidades.

La gestión multimarca no es exclusiva de grandes inversores. También se ha convertido en una estrategia viable de crecimiento para franquiciados con solo una o dos unidades. Eso sí, que puedas hacerlo no significa que debas hacerlo, ni mucho menos que sea sencillo.

Al gestionar varias marcas, aumentan los empleados, las exigencias y los procesos que debes coordinar. A cambio, se abre la puerta a mayores beneficios y diversificación, pero antes de dar el paso conviene entender bien las complejidades y riesgos de invertir en franquicias de distintos grupos empresariales.

¿Cuándo Podría NO Estar Permitido?

Aunque la gestión multimarca suele ser posible, algunos franquiciadores establecen límites claros. La clave está en tu contrato de franquicia, que es el documento que determina si lo puedes hacer o no.

Hay contratos que prohíben al franquiciado tener o gestionar otros negocios, sobre todo si se consideran una distracción o un posible conflicto de intereses.

Si estás valorando invertir en una segunda marca, es fundamental que revises con detalle qué permite (y qué no) tu contrato actual.

¿Qué Revisar en el Contrato de Franquicia y en el DIPF?

Algunas marcas son muy protectoras con tu tiempo y dedicación. Por eso, incluyen restricciones en el contrato de franquicia para impedir que gestiones otros negocios.

Si estás pensando en invertir en una segunda marca, estos son los apartados clave que debes revisar en tu contrato y en el Documento de Información Precontractual (DIPF).

Cláusulas de Exclusividad

Suelen aparecer en el apartado de territorio o restricciones del DIPF. Su objetivo es evitar que abras o gestiones un negocio que compita directamente con tu franquicia, normalmente dentro de una zona geográfica concreta.

Por ejemplo, si tienes una franquicia de bocadillos, podrías estar limitado/a para abrir cualquier negocio de restauración en un radio de 10 kilómetros.

Cláusulas de No Competencia

Van un paso más allá que la exclusividad. No solo limitan lo que puedes hacer mientras dure tu contrato de franquicia, sino también después de finalizarlo.

Por ejemplo, si vendes tu franquicia de fitness, una cláusula de no competencia podría impedirte abrir o trabajar en otro gimnasio en la misma zona durante varios años, incluso si es un proyecto propio. Esto protege al franquiciador de que antiguos franquiciados usen lo aprendido para convertirse en competidores directos.

En el DIPF, estas condiciones suelen recogerse en el apartado sobre renovación, rescisión y cesión de contrato. Revísalo con detalle para no encontrarte con sorpresas más adelante.

Restricciones por Conflicto de Intereses

Son cláusulas más amplias que otorgan al franquiciador la facultad de impedirte gestionar cualquier negocio que consideren una distracción o una prioridad en conflicto, incluso si no pertenece al mismo sector.

Por ejemplo, si tienes una franquicia de clases de refuerzo escolar y quieres invertir en una escuela de natación, el franquiciador podría entender que eso resta dedicación a sus operaciones. Puede parecer estricto, pero desde su perspectiva protege la calidad y la coherencia de la marca.

Estas cláusulas suelen incluir un lenguaje ambiguo como “cualquier negocio que compita o interfiera con la franquicia”, lo que deja margen a interpretaciones muy amplias. Conviene aclarar cualquier término poco preciso directamente con el franquiciador antes de firmar, para evitar disputas en el futuro.

Solapamiento Territorial

Incluso si se trata de franquicias de sectores distintos, el franquiciador puede no permitir que gestiones otro negocio en la misma zona geográfica. El motivo es que dividir tu atención y recursos puede afectar al equipo de trabajo, las acciones de marketing y la percepción de la marca en la comunidad local.

Otros Aspectos a Tomar en Cuenta

• Cláusulas de conflicto de marca: algunos franquiciadores prohíben gestionar marcas competidoras o que puedan parecerlo, sobre todo si operan en sectores similares. Por ejemplo, dos franquicias de comida rápida.

• Resolución de disputas y prioridades: en caso de conflicto, estas cláusulas pueden establecer a qué franquiciador debes atender primero.

• Requisitos de dedicación: el contrato puede obligarte a dedicar una parte concreta de tu tiempo y recursos al negocio, lo que dificulta justificar la gestión de otra franquicia.

• Necesidad de aprobación: algunos franquiciadores exigen autorización por escrito antes de que inviertas en otro negocio, especialmente si se trata de otra franquicia.
  
  

Lo recomendable es hablar de tu intención con tu franquiciador actual antes de firmar un nuevo acuerdo. Y, por supuesto, contar siempre con asesoramiento legal antes de comprometerte con una segunda marca.

¿Por Qué Algunos Franquiciados Deciden Invertir en Varias Marcas?

Como ves, gestionar franquicias de distintas marcas es complejo y puede traer consigo muchas exigencias legales.

Entonces, ¿por qué hacerlo? Para la mayoría de los inversores la clave está en no poner todos los huevos en la misma cesta.

Estos son algunos de los principales beneficios.

Diversificación de Ingresos

Si todos tus ingresos dependen de un único sector, quedas expuesto/a a sus altibajos. Al invertir en varias marcas, especialmente de industrias distintas, reduces esa dependencia. Si una franquicia tiene un mes flojo, otra puede ayudarte a compensar.

Resiliencia Frente a Diferentes Sectores

Pensemos en lo que ocurrió durante la pandemia de COVID-19: algunos sectores como la restauración y el comercio minorista sufrieron fuertes caídas, mientras que otros como los servicios a domicilio, el cuidado de mascotas o el fitness, crecieron.

Tener franquicias en distintos ámbitos te permite capear mejor las crisis económicas sin ver cómo desaparecen de golpe todos tus ingresos.

Equilibrio de la Estacionalidad

Combinar negocios con temporadas diferentes puede ayudarte a mantener un flujo de caja más estable durante todo el año.

No todas las franquicias generan beneficios constantes, así que contar con varias fuentes de ingresos te permite superar con más comodidad los meses más flojos.

Crecimiento Estratégico

Algunos franquiciados invierten en varias marcas como parte de un plan empresarial más amplio, pensado para llegar a distintos públicos o mercados. Bien ejecutada, cada marca cumple un papel específico dentro de la estrategia global.

Los franquiciados multimarca con visión a largo plazo construyen carteras de negocios seleccionando enseñas que se dirigen a audiencias y necesidades de cliente diferentes.

Riesgos de Tener Varias Franquicias

Gestionar franquicias de distintas marcas ofrece ventajas claras, pero no todo es tan sencillo. Estos son algunos de los principales riesgos que deberías valorar antes de dar el paso.

Dispersión de tu Atención

Al manejar varias marcas, corres el riesgo de repartir demasiado tu tiempo y energía. Cada franquicia tiene sus propios estándares, equipo y operativa. Es fácil subestimar la carga de trabajo que supone coordinarlo todo.

Sin una buena delegación y un liderazgo sólido, puedes acabar saturado/a, lo que repercutirá en la calidad del trabajo de tu equipo y en la experiencia de tus clientes.

Conflictos Entre Franquiciadores

Si dos marcas reclaman tu atención al mismo tiempo, puedes verte en disputas de prioridades o incluso en conflictos legales. Algunos franquiciadores esperan dedicación exclusiva, sobre todo en fases de expansión o durante campañas clave.

Si ambas marcas exigen protagonismo en el mismo periodo, el escenario puede complicarse rápidamente, llegando incluso a penalizaciones contractuales. Por eso, es fundamental ser transparente con cada franquiciador desde el principio y evitar combinar marcas con calendarios operativos o picos de actividad que choquen entre sí.

Complejidad Legal

Invertir en varias marcas significa gestionar distintos Documentos de Información Precontractual (DIPF), plazos de renovación, posibles registros y reglas que a veces pueden entrar en conflicto. Un error puede salir muy caro.

La gestión multimarca exige una gran organización, basta con incumplir un plazo o una cláusula sin querer para poner en riesgo tu franquicia.

Además, la normativa en materia de franquicias puede variar según la ubicación, por lo que conviene apoyarse en un abogado especializado en el sector.

Tensión de Tesorería

Los costes iniciales, cánones de entrada, regalías, aportaciones a marketing y alquileres se acumulan rápidamente cuando gestionas varias marcas.

Cada franquicia implica gastos propios. Si no haces previsiones financieras separadas para cada una, una marca puede acabar drenando recursos que necesitas para otra.

La clave es contar con un colchón de liquidez común y someter tus números a escenarios de estrés antes de firmar un segundo contrato.

¿Qué Pasa Cuando las Cosas se Tuercen?

Siempre debes estar preparado/a para el peor escenario. Ya sea una demanda, una unidad con bajo rendimiento o incluso una crisis global, necesitas tener estrategias de salida claras para cada marca.

Muchos nuevos franquiciados piensan que podrán vender fácilmente o abandonar el negocio sin más, pero no siempre es así. Algunos contratos incluyen cláusulas que limitan a quién puedes vender la franquicia, e incluso otorgan al franquiciador un derecho preferente de recompra.

Recuerda que un contrato de franquicia es un acuerdo legalmente vinculante que suele extenderse hasta 10 años o más. Comprar una franquicia nunca debe ser una decisión tomada a la ligera. Si tu negocio no cumple los resultados o incumples el contrato, el franquiciador incluso podría rescindirlo de forma unilateral.

Consejos para Gestionar con Éxito Varias Franquicias de Distintas Marcas

Una de las mejores formas de mantener el control cuando gestionas varias marcas es planificar bien antes de empezar.

Eso implica proyectar no solo ingresos y costes, sino también el tiempo y la complejidad operativa que vas a asumir. Algunos consejos clave.

Crea Sistemas Diferenciados para Cada Marca

Aunque tengas varias franquicias de comida rápida, cada una puede usar tecnologías, proveedores y programas de formación distintos. No intentes forzar el modelo de una sobre otra.

Cada marca necesita sus propios procesos, materiales de formación, proveedores y canales de soporte. Lo recomendable es trabajar con checklists, indicadores (KPIs) y procedimientos específicos para cada una. Parece más trabajo al principio, pero te evitará muchos problemas en el futuro.

Saber Cuándo Escalar

No te lances a crecer demasiado pronto. Si acabas de abrir una franquicia hace menos de un año, dale tiempo a consolidarse antes de dispersar tus recursos. Un local exitoso en una marca no garantiza que ocurra lo mismo con otra.

Antes de expandirte pregúntate: ¿Funcionan bien tus unidades actuales sin tu supervisión directa? ¿Tienes un equipo de liderazgo sólido?

Escalar demasiado rápido puede desestabilizar tu base y generar grietas difíciles de corregir.

Elige Marcas Complementarias (No Competidoras)

Es fundamental apostar por una franquicia que puedas gestionar con comodidad, pero evita aquellas que compitan directamente con tus unidades actuales. Una cafetería y una tintorería pueden convivir sin problema, pero dos hamburgueserías acabarán restándose clientela.

Las marcas complementarias incluso pueden apoyarse entre sí con promociones cruzadas, campañas de marketing conjuntas o compartiendo la misma base de clientes. Ese solapamiento genera eficiencias operativas y refuerza la visibilidad de ambas sin disputarse la misma venta.

Por ejemplo, combinar una franquicia de batidos con un gimnasio. No canibalizan el mercado y hasta pueden compartir flujo de clientes. En cambio, si gestionas dos marcas distintas del sector fitness, probablemente surjan fricciones.

Mantén las Finanzas Separadas

Puede parecer obvio, pero muchos franquiciados multimarca no lo hacen.

Abre cuentas bancarias independientes y lleva contabilidad, balances y cuentas de resultados separados para cada marca. Esto simplifica los impuestos, evita errores costosos y te da una visión clara de qué está funcionando y qué no.

Si mezclas la contabilidad, solo conseguirás complicar la gestión y perder perspectiva.

Contrata Gerentes Eficaces

Incluso un único local puede resultar difícil de gestionar sin apoyo. Cuando sumas varias unidades, hacerlo en solitario es prácticamente imposible.

Necesitas incorporar gerentes de confianza que puedan liderar el día a día. Un buen gerente actúa como tus ojos y oídos en el negocio: protege la marca, forma al personal, gestiona las operaciones cotidianas y te alerta de los problemas importantes.

¿Pensando en Gestionar Varias Marcas?

Tener franquicias de distintas marcas puede ser una estrategia inteligente para hacer crecer tu negocio y diversificar tus ingresos, pero no es un paso que debas dar sin una planificación rigurosa.

La gestión multimarca implica restricciones legales, mayores exigencias operativas y una administración financiera más compleja. No es un movimiento sencillo, aunque sí puede ser una gran opción para emprendedores con experiencia que buscan un reto.

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